Calma

Palabra tan dual, tan de dos filos, tan sencilla, sin embargo con opciones tan distintas; puede verse como un agua en calma y pienso que esto conlleva a un estado de reposo e inmovilidad absoluta, prefiero pensar la calma como algo más interno, prefiero sentir esta calma desde dentro, un ser un agua en calma, sino un mar en calma, un mar testigo de tormentas o abismos pero que no por ello se distrae de su centro, de su equilibrio interno, prefiero esa calma que te da la sabiduría y el conocimiento, esa clama que sólo uno mismo se puede dar y mantener.

Ese estado de tranquilidad aún cuando el caos reine, por momentos, a mí alrededor, pues sé que solo asi atraeré seres y situaciones con la misma vibración y en la misma sintonía y calma, calma rica y disfrutable, sabia y enriquecedora, que más que necesitar explicaciones, necesita sentirse.